CUANDO TODO VALE

En un mundo donde, valga la redundancia, todo vale, la ética, la moral y los principios cobran un valor todavía mayor, por lo menos en lo que a mi respecta. Días tras día veo como el pez grande se come al pequeño, me entristece, me da pena ver como trabajos llevados con cariño, pasión e incluso amor se ven arruinados por la mano de lo que todo lo arrasa, por gente…porque al fin y al cabo son personas como tú y como yo, con dos ojos, dos brazos…pero carentes de escrúpulos, por lo menos en el caso que a continuación relato, cuando se deja de jugar con las mismas armas que el adversario, para posteriormente pasar a pegar el tiro por la espalda y rematar al rival.
Admiro la dedicación, tenacidad, valentía le inteligencia y el arrojo que hacen falta para llevar a una pequeña empresa a convertirse en una grande, lo cierto es que hacen falta un par de pelotas para llevarte toda esa cantidad de problemas a la camas y que la gente que tienen alrededor casi ni se den cuenta. Al mismo tiempo también os diré que hace años me daba pena entrar en una tienda de bicicletas y ver al típico tendero “de mala leche”, que no ve más allá de sus narices, ruín y judío como el sólo, más quemado que una Rieju de 49 y que pasa el día afilando sus garras para pegarte el sablazo del año en su taller. Todas estas cosas que os cuento y como podéis comprobar son sentimientos enfrentados que flotan en mi ser y de los que obligatoriamente debo sacar alguna conclusión positiva.
La conclusión es fácil y sencilla: el que algo quiere algo le cuesta o como diría mi abuelo: el que quiera peces que se moje el culo, pero lo que sí es cierto es que el gran gigante de venta online por excelencia ha despertado en todo el sector mucho cabreo, se ha saltado las reglas del juego y lo peor de todo es que ha sido con premeditación y alevosía, con el único objetivo de acaparar todo el mercado europeo. Tan sólo se le ha escapado un pequeño detalle y es que el mundillo de las dos ruedas lo formamos gente enamorada de la bicicleta, empezando por las marcas, siguiendo por los distribuidores, pasando por las tiendas, bikeparks y terminando en ti, el consumidor final.
Po r suerte las tiendas locales han cambiado, ahora da gusto ir a comprar allí, buen trato, gente profesional que ama las dos ruedas y con la que estoy seguro puedes hablar del precio, sobre todo antes de comprarlo fuera de nuestras fronteras por un ahorro minúsculo, habla con tu tendero y compra en tu tienda local, apoya tu escena local (como dirían los americanos). Sin darte cuenta estarás contribuyendo a la creación de un sector mejor, con mejores medios de comunicación, vídeos más profesionales con los que disfrutar en tu sillín, campillos equipos de DH, 4X, BMX, instalaciones cada vez más profesionales como skateparks o bikeparks, más competiciones, más riders profesionales, JODER y todo esto sólo por apoyar el mercado nacional y a tu tienda local !!!. Hablemos claro, Chain Reaction no va a venir a construirte un campillo, ni le dará el coñazo a tu ayuntamiento para construir un skatepark , ni te va a sponsorizar, ni va a hacer una competiciónen tu pueblo, ni en tu ciudad, ni en ningún miserable sitio, tan solo está esperando tu pasta para meterla en su máquina registradora aprovechando que al operar de manera intracomunitaria se aprovechan de no pagar impuestos, impuestos que tu país necesita para crecer y así tener instalaciones mejores para ti.
Dicho esto sólo me queda decir: ANTICHAINREACTION
WALLRIDE es la única revista del sector que no publicita webs online de fuera de nuestras fronteras y que con la distribución gratuita favorece un trato directo con las BIKESHOPS locales

David Cachón
Director de Wallride Magazine.

NoBikeNoLife suscribe todas y cada una de las palabras redactadas por David Cachón. La regla de tres no es “si los de la web ganan dinero, en la tienda de bicis de la esquina lo que están es forrándose a costa mía”, NO !!!. Si supierais con los márgenes tan ridículos con los que las tiendas cuentan en muchas ocasiones, casi que os echaríais las manos a la cabeza pensando en cómo sobreviven. De ese ridículo margen hay que sacar para pagar alquiler, luz, agua, stockaje (porque nos gusta que cuando vamos buscando algo para nuestra bici lo tengan), almacenaje, posibles empleados, etc… No sé dónde nos va a llevar, ni de qué manera puede derivar todo esto. Si las tiendas físicas van a tener que vivir únicamente del servicio de montaje/reparación, si cada vez serán más las tiendas físicas que monten paralelamente su tienda online, o no sé. Lo que sí sé es que en el camino están cayendo muchas ilusiones rotas de enamorados del ciclismo que en un momento dado lo dieron todo por un proyecto. Lo que está claro es que todo esto pinta muy mal. Y realmente es una lástima porque al ser una pescadilla que se muerde la cola, todo termina por repercutir en detrimento del sector de la bicicleta y en ti como eslabón final. Por suerte, aún estamos a tiempo de darle la vuelta a la tortilla y TU en vez de ser el eslabón final puedes ser el primer eslabón. Ve y apoya a tu tienda local, infórmate bien de los precios, sopesa los pros y los contras y decide sobre la compra en un lado u otro. Entre todos, podemos cambiar ésto.